
El que me critique por lactar a mi bebé en público le sugiero que se coloque un paño en su rostro para que no vea la escena de amor y ternura que puede ver entre mi hijo y yo.
Además, puede entrar a un baño y de esa manera sentirse seguro de no verme en plena acción de alimentación a mi pequeñito. Tal vez esto no sea suficiente, pero si en algún lugar estoy sentada con mi chiquito, procure sentarse frente a mi o muy atrás. Así no se sentirá ofendido u ofendida por el espectáculo.
De mi parte le diré que no haré nada en específico para evitar su molestia. En ocasiones me coloco un pañito, pero OJO! Aveces el chico se molesta y me lo arrebata, de esa forma lo tira al suelo y pues…
Si mi bebé tiene hambre, lo alimentaré. Si está llorando, lo calmaré. No dejaré de ser madre para ser la amiga comprensiva con todos menos con los suyos.