Por Thomas Jimmy Rosario Martínez DVPR
He recibido varios mensajes de usuarios cuestionando dos poemas de Diosdado Cano que publicamos recientemente tutulados Proclama de Alerta y Buscones .
Como política editorial, no comentamos a los escritores que aportan a la discusión pública de los asuntos vegabajeños y puertorriqueños por medio del Diario Vegabajeño de Puerto Rico; mucho menos censuramos ideas o expresiones.
El Diario Vegabajeño de Puerto Rico es una fusión entre noticiero y foro de análisis y un continuo difusor de la cultura puertorriqueña y de los vegabajeños. Los medios utilizados para nuestros propósitos pueden ser la prosa, el ensayo, la poesía, caricaturas, vídeos e imágenes fijas o cualquier otro. En ocasiones damos la información sencilla, en otras la acompañamos de retratos o utilizamos otros recursos, siguiendo una tradición local de periodismo y cultura y la modernidad visible.
Nuestros escritores anónimos como El Periodista del Pueblo y Edgar Orilla tienen garantía de que no vamos a divulgar su identidad. Los analistas pueden utilizar el verso, como lo hizo José Gualberto Padilla en sus debates con Manuel de Palacios o Don Agustín Alvarez Rodríguez en sus satíricas rimas políticas.
No hay cortapisas en lenguaje, estilo o medio. Nuestra única súplica es el autocontrol en las palabras, porque nuestra publicación no puede albergar obcenidades por respeto a nuestros usuarios y a niños que lo leen y lo utilizan para hacer sus asignaciones de las escuelas.
Diosdado y el suscribiente somo amigos de la niñez. Hemos coincidido en algunas cosas, pero no en todas. Privadamente somos críticos mutuos de lo que escribimos, pero yo no soy su censor ni tampoco estoy en desacuerdo con los poemas. Es su pensamiento, en su medio y es su estilo.
Aquí solamente somos el viento en las alas para que los pensamientos despeguen.