Por Thomas Jimmy Rosario Martínez
La política es necesaria para seleccionar nuestros gobernantes. Los gobernantes son necesarios para manejar los asuntos públicos de nuestros tres gobiernos.
Las primarias son necesarias para elegir los mejores candidatos y los mejores candidatos son los que deben aparecer en las papeletas de votación.
Sin las primarias o sin candidatos idóneos se pierde una parte importante de la democracia, por eso es necesario que los candidatos participen para que haya más opciones para escoger. Y es importante que los partidarios elijan a sus candidatos y luego participen en las elecciones generales.
No votar porque nos sintamos decepcionados, no es opción. No podemos nunca perder nuestra oportunidad de participar en la democracia y expresar lo que sentimos y creemos sobre los que tienen oportunidad de gobernarnos y sobre el estilo y sustancia de cómo nos gobernarán.
Una persona en su sano juicio no se dispara con un arma de fuego porque el amor comienza por uno mismo. Si uno se ama, aprovecha las oportunidades que la vida le da para buscar la felicidad. Y aprueba a los políticos que hacen lo correcto y rechaza a los demás.
El que crea en estos principios, debe acudir a votar por sus candidatos partidistas y en la elección general. Para el que no crea, la misma democracia no obliga a ejercer el voto, pero se nos obliga a sufrir las malas selecciones.
La democracia es, pues, un ejercicio que nos da la oportunidad de participar o de no hacerlo, de creer o no creer y de tener fe o no tenerla.