Por Miguel Ojeda Trinidad
El alcalde Marcos Cruz ha excluido a los músicos vegabajeños del programa musical de las Fiestas de Pueblo de acuerdo a lo que expresa el trombonista y Director de Orquesta Egui Prado. La única participación aparente es el tradicional Rumbón, que hasta donde sabemos, no hay pago a los músicos que participen en el mismo.
Hace unos meses atrás el alcalde pidió opinión a los usuarios de Facebook para que expresaran sus preferencias musicales. Supongo que ese ha sido el norte para que se escogieran grupos fuera de Vega Baja.
Los artistas no vienen gratis a Vega Baja. Alguien les paga y de alguna manera nuestra ciudad invierte recursos para lograrlo. Y si el alcalde promueve el que otros músicos que no sean de Vega Baja nos invadan, eso le resta oportunidad a los músicos vegabajeños para que tengan su oportunidad frente al público vegabajeño. Me parece que eso es menospreciar los valores locales en la cultura musical.
Otros alcaldes tradicionalmente le daban oportunidad a los vegabajeños incluso primero que a cantantes o grupos fuera de Vega Baja. Eso hace esta administración distinta, y si eso «marca la diferencia», no es bueno ese menosprecio al talento local. Porque menosprecio es valorar menos.
Lo otro que queremos manifestar es que los más bajos presupuestos para contratar músicos locales es precisamente en Vega Baja. A cuenta de bajos emolumentos se hacen actividades para los padres, madres y festivales donde el pago a los artistas vegabajeños es nada o muy poco. Con tal falso apoyo no puede progresar nuestra ciudad en el arte musical como en los tiempos de gloria del Trío Vegabajeño, de Frankie García, de La Reforma, Exodo 74 o de Santo y la Tuna de San Juan.
El alcalde puede decir que él no decide los grupos que participan pero eso no es verdad. Los promotores preguntan y el alcalde hizo su lista de preferencias a base de su propio sondeo. Eso hace que la celebración gloriosa de la fecha de la fundación tenga la raquítica idea de hacer unas fiestas de pueblo como las hacen en todos los demás lugares y sin brillo local.
La diferencia puede hacerse realmente de una manera justa si se dedica unos días del año, que puede ser en las Fiestas de Pueblo, como celebración de los logros de nuestro talento musical, pero el alcalde no parece contar con buen asesoramiento ni un corazón leal a los vegabajeños en estos momentos.
Le recuerdo que «la música es el alma de los pueblos» y que nuestra ciudad tiene muchos de los mejores músicos del mundo. Hay que apoyarlos. Yo conozco ese mundo porque vengo de él y sé lo que vale para todos, un espacio para descollar entre los nuestros.