
El Vegabajeño Mike Arroyo es, sin lugar a dudas, un hombre de Dios. Consagrado al evangelio, también predica con el ejemplo como ciudadano particular administrando una academia de enseñanza musical en nuestra ciudad. Sus discípulos son de todas las edades, contando con la paciencia y el criterio educativo de excelencia. Recientemente hubo en el Teatro América la presentación de sus estudiantes, la quinta de la historia y fue verdaderamente motivadora la muestra de buenos ejecutantes que presentó en varios niveles. El alcalde Marcos Cruz, que estaba presente, le felicitó y estimuló a continuar adelante en su gesta.