Edgar Orilla| Eso es más complejo…

Edgar Orilla

En efecto así es, la inserción de Puerto Rico a nuevos mercados llámese biotecnología, energía renovable, proyectos de todo tipo plagados de alternativas e intenciones sustitutas o alternas conducentes para la maximización de los recursos naturales que Puerto Rico posee. A simple vista  parece no estar correctamente dirigida por aquellos que de una u otra forma se han puesto al frente de esas nuevas ideas, o simplemente están comunicando para las gradas y sin nadie que las ocupe.

Por evitar mucha fraseología de mi parte, que al fin y al cabo es lo que los políticos ofrecen y tiene a este país en este punto, voy directo a la raíz. Hemos visto durante años a los gobiernos utilizando mayormente la imagen de algún deportista o ente acomoditíciamente publicitario para capitalizar sus propuestas. Hoy observamos que se utiliza la imagen de dos de esos atletas puertorriqueños que han destacado por sus ejecutorias en las arenas «beisbolisticas», más que por sus conocimientos en las «artes de la política», me refiero a Iván Rodríguez y Roberto Alomar.

Si los gobiernos todavía a estas alturas del partido necesitan  la imagen deportiva de alguna persona sin consecuencia política para implementar sus ideas, en otras palabras, de manera que lleguen a través de una o varias caras por que su estabilidad personal y hasta emocional es mayor a la del propio gobierno,- sin lugar a dudas señores, entonces estamos en «Disney World» – , viviendo en una fantasía , por que aquellos que tienen la obligación, !y punto!, de hacerse sentir como lideres, propiamente entienden que no son nuestros mejores exponentes ante el resto del universo y recurren a cualquier disparatada publicitaria con el primero que aparezca.

Bien lo dijo Lalo » Si no hay material no hay coco no», yo añado si no existe aptitud para realizar, desempeñar , desarrollar, Puerto Rico jamas podrá tan siquiera hacerse y ceñirse a la idea de un «ave fenix» y renacer desde sus cenizas.

Impropio e irracional es colocar al frente de una campaña mediatica gubernamental a personas completamente ajenas, academicamente hablando, al conocimiento de la estructura corporativa y funcional, para la cual quien sabe si gratuitamente se prestaron, siendo reclutados para su presentación por que alguien con menos ideas e inteligencia que ellos posiblemente les dijo que, «de seguro con su presencia resaltarían la imagen de Puerto Rico para un posible programa de inversión de capital extranjera en esta tierra». Sencillo, si según las plazas gubernamentales deben ser ocupadas por personas academicamente preparadas para ejercerlas (aunque cosas a diario vemos) el gobierno debe entonces enviar a estos atletas, o a cualquiera que represente al poder ejecutivo y sus ideas a estudiar el comportamiento de las empresas que según el gobierno y sus mensajeros establecen, quieren o pueden hacer negocios en, y con Puerto Rico.

» Es con el conocimiento e instrucción propia y adecuada de primera mano en que las probabilidades del fracaso se reducen, algo que parece estar ajeno del gobierno en estos asuntos».

Me pregunto y me contesto ¿Qué fuerza mayor que no sea la improvisación lleva a un gobierno al ampararse en rostros que solo conocemos por otro tipo de habilidades, y no por estar formalmente capacitados al dialogo sobre asuntos de importancia en la implementación de política pública y su desarrollo?

No resto méritos a las aptitudes deportivas de los atletas antes mencionados, ni la de ninguno, por que de eso no es que se trata este problema. El gobierno y la gubernabilidad del aparato administrativo es asunto serio,o al menos así deben tenerlo en cuenta.

 No se trata de presentarnos a dos individuos haciéndose tiradas de una esquina a otra con una pelota dentro de un salón de recepciones, ambos finamente ataviados con un gabán puesto luciéndose por lo único que dominan ante un coro de «veinte gatos aplaudiendo y sonriendo». Hay que tener seriedad, compromiso, y sobre todo responsabilidad pública para presentar ideas, así mismo colocar las personas indicadas, y en todo caso las personas responsables del desarrollo conceptual. Puerto Rico no se merece espectáculos baratos en su contenido. Se necesita explicación de las ideas y conceptos por personas capacitadas, no por muchachos de mandados. Y en esa linea de «muchacho de mandado» como cuestión de hechos y «para su orgullo y hoja de servicios al Pueblo de Puerto Rico», fue el propio Iván Rodríguez , «y su estima», quien más disertó de lo que desconoce.

Una imagen siempre será buena y aceptada siempre y cuando este directamente relacionada, Ej; Iván Rodríguez anunciando guantes, bolas y bates, al igual que Roberto Alomar. El gobernador de Puerto Rico cortando la cinta de por lo menos 10 compañías locales o extranjeras que durante el primer año de su mandato se instalaron en Puerto Rico, con la noticia de que cada una de ellas generará mil empleos directos. Esto es lo que se espera de cada quien, esto es parte de lo que al Pueblo se le prometió.

Debemos sí,- creer en aquel empresario que formalmente venga a invertir en esta tierra después de haber hecho un conciso análisis empresarial de costo beneficio, no solo a sus intereses particulares, sino primordialmente y en igualdad de condiciones a los del Pueblo y su gente. No podemos dar crédito a las palabras de aquellos que hacen una fiesta publicitaria «sin ton ni son» con los elevados gastos que la misma conlleva, fantaseando con el abanico de probabilidades dentro de un espectro inconsecuente en donde «dicen y no dicen nada» en concreto.

!!Basta ya de tonterías………..

Resumiendo:

!!Qué nos debe importar a nosotros los puertorriqueños lo que nos digan «personas de mandados» que se alquilan con el gobierno de turno dispuestas a decir cualquier cosa en complicidad por ocultar la cruda realidad que vive Puerto Rico!!, si total, ellos hicieron sus vidas fuera de Puerto Rico, y la realidad es que poco les importa lo que al Pueblo en general le suceda. Si no estoy en lo correcto los exhorto a que inviertan sus millones en conjunto con las empresas que juran y perjuran deben allegarse a nuestras costas, y «hasta nos dicen que conocen a sus dueños siendo amigos en común». Pues a  ver si invierten – de esta manera avanzaremos a la reconstrucción de este país, no les parece. No es de puro faranduleo , bolas y bates que vive este Pueblo, se agradecen las escuelas deportivas y las aportaciones caritativas de alguno de ellos, pero el problema es más complejo y nuestros atletas no son políticos, ni deben ser utilizados como sastres por estos sus amigos políticos del momento, tampoco los atletas son , o serán  indispensables si no desean serlo. Es hora de que termine «la mascarada política y el cantinfleo» que mantiene al país en un espiral descendente.- …»por que el problema es más complejo…»

Edgar Orilla

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